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Se llevó a cabo la ceremonia del Premio UNITEC a la Innovación Tecnológica para el Desarrollo Social 2021
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El proyecto
Bifrost Biotechnologies
utiliza células propias del paciente para la fabricación de la córnea.
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De las aulas universitarias deben surgir las
investigaciones, propuestas y proyectos productivos que el país
requiere: Juan José Hurtado, presidente y director General de Laureate
México.
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El emprendimiento con impacto social es un
importante eje de desarrollo que propicia la mejora de la sociedad:
Alejandro Montano, Rector Institucional de UNITEC.
Ciudad de México.- El proyecto de córnea desarrollada en laboratorio, trasplantable y que cumple con las funciones del tejido humano, denominado
Bifrost Biotechnologies a cargo de Hugo Arian Marin Tapia,
egresado de la Universidad Autónoma del Estado de México, fue uno de los
cinco galardones del Octavo Premio UNITEC a la Innovación Tecnológica
para el Desarrollo Social 2021, que recibieron este
reconocimiento por parte de la institución.
La
ceremonia virtual del Octavo Premio UNITEC a la Innovación Tecnológica
para el Desarrollo Social 2021, fue encabezada por Juan José Hurtado,
presidente y director General de Laureate México; Alejandro Montano,
Rector Institucional de UNITEC y, del Dr. Gerardo Dubcovsky,
Vicerrector Institucional de Incubadoras, Innovación e Investigación de
la UNITEC.
En tanto
que, Hugo Arian, quien actualmente estudia el Doctorado en Ciencias con
Especialidad en Biología en la UAEM, comentó que, en esta córnea hecha
en laboratorio, se utilizan células propias del paciente
disminuyendo la probabilidad de rechazo. De acuerdo con el ganador del
Premio UNITEC, en México se realizan de 3 a 4 mil trasplantes de córnea
al año aproximadamente, sin embargo, en el 2020, el primer año de la
pandemia de COVID-19, la cifra disminuyó a mil
trasplantes, y ahora en este 2021 hay cerca de 6 mil personas en lista
de espera.
Para poder
reproducir cualquier tipo de tejido u órgano del cuerpo -incluida la
córnea- se emplean técnicas de biotecnología e ingeniería de tejidos.
Para ello se necesita un material que sirva como base para
sostener el crecimiento de tejido y ese material debe tener la forma y
las características físicas del tejido que se quiere reproducir,
explicó.
Por otro lado, añadió, también se necesitan células, las cuales van a formar el tejido.
“En el
caso de la córnea ocupamos un material que tiene la forma y la
resistencia de la misma y, además las propiedades ópticas. Una vez que
tienes el material, lo que sigue es injertar las células que van a
formar
la córnea en el material y después cultivarlo para que se vaya
desarrollando en un periodo establecido. Básicamente es la combinación
de un biomaterial con células, nosotros ya trabajamos y ya tenemos
desarrollado nuestro biomaterial, la siguiente etapa será
comenzar con el cultivo de las células en el material, para comenzar a
reproducir la córnea”, explicó quien dirige el proyecto
Bifrost Biotechnologies.
El estudio
menciona que se utilizan células propias del paciente para la
fabricación de la córnea, que es lo que disminuye la probabilidad de
rechazo en el paciente. “Como sabemos, al momento de hacer cualquier
estructura ajena a nuestro cuerpo, se produce una respuesta inmune, se
produce una respuesta que es mediada por algunas cuestiones del sistema
inmunológico. Nosotros tenemos la hipótesis de que incorporar células
del paciente permitiría que el sistema inmune
reconozca la nueva córnea como parte propia del cuerpo, porque son las
mismas células las que están alojándose”, señaló.
Hasta el momento, el proyecto
Bifrost Biotechnologies de córnea no ha tenido una implantación en
un ser humano, ya que Hugo Arian se encuentra en la etapa de culminar el
material, “lo que sigue es reproducir la córnea que pueda ser
trasplantada en un cerdo o un conejo por cuestiones
de regulaciones, hay qué hacer muchas pruebas y etapas antes de
implantar en un ser humano”, comentó.
Agregó que
en este momento lo que busca es ahorrar tiempo, no reproducir una
córnea completa sino reproducir la parte superficial de la córnea que se
llama Epitelio, que es una de las partes más afectadas. “Hay
diferentes trasplantes de córnea, no siempre se trasplanta la córnea
completa, lo que buscamos hacer en un inicio, para tener un producto más
rápido, es trabajar en la parte superficial y de esta manera tener un
tratamiento para este caso de enfermedades de
la superficie de la córnea. Una vez que logremos hacer la parte de
investigación completa, lo que sigue es escalar hacia el trasplante en
humanos”, expresó.
Hasta
ahora, el proyecto ha funcionado tal y como se esperaba. “Hemos obtenido
un material que al parecer reúne propiedades ópticas y mecánicas de la
córnea, ya la siguiente parte que nos toca ver es que nuestro
material sí pueda soportar el crecimiento de las células”, dijo.
Para Hugo
Arian, ganar el Premio UNITEC 2021 es una oportunidad grande, porque
implica la obtención de recursos económicos para continuar con el
desarrollo tecnológico de
Bifrost Biotechnologies, “obviamente también la parte de dar a
conocer nuestro proyecto, de tener el respaldo de una institución como
UNITEC para que certifique de cierta manera que nuestro proyecto es de
calidad, que puede tener consecuencias favorables
para muchas personas”, indicó.
Agregó que
ganar el Premio UNITEC le dio la posibilidad de acceder a la red de
contactos y de colaboración de la universidad. “La visibilidad que esto
va a representar para nosotros es un factor que siempre suma,
es una convocatoria de una gran institución como es UNITEC en cuanto a
la educación en el país, siempre va a sumar herramientas importantes”,
comentó.
Finalmente,
Hugo Arian Marín Tapia dijo que ser uno de los cinco ganadores del
Premio UNITEC es un honor, representa algo que lo empuja, “es una
motivación obtener el reconocimiento, más cuando se trata de
instituciones
reconocidas, siempre es un empujoncito para continuar con nuestro
desarrollo, significa un voto de confianza que deciden tener en nuestro
proyecto y de esta manera avanzar con pasos más firmes”, concluyó.
Entregan el 8º Premio UNITEC
Al
dirigirse a los ganadores del Octavo Premio UNITEC a la Innovación
Tecnológica para el Desarrollo Social, Juan José Hurtado, Presidente y
Director General de Laureate México, señaló que las aulas
universitarias,
son uno de los principales lugares en donde pasa el análisis y la
discusión de los grandes problemas que México enfrenta, pero también son
el lugar donde deben surgir las investigaciones, las propuestas y los
proyectos productivos que el país requiere en sintonía
con su misión y compromiso social.
El Premio
UNITEC convoca a jóvenes universitarios a presentar proyectos que además
de tener un enfoque social, apoyan en soluciones tecnológicas,
novedosas para resolver problemáticas sociales, ambientales, medicas
etc. “El éxito de estos proyectos es relevante para todos, pues un
mayor nivel de innovación aunado a la creación de más empresas incentiva
la generación de productos, procesos y servicios con mayor valor
agregado e impulsa la incorporación de más empresas
mexicanas a cadenas globales de valor”, comentó.
Para el
Dr. Alejandro Montano Durán, Rector Institucional de la UNITEC, en la
universidad están convencidos que el emprendimiento con impacto social
es un importante eje de desarrollo, que propicia la mejora de
la sociedad, el progreso económico, la renovación del tejido social y
productivo, así como el desarrollo tecnológico del país.
“Las
instituciones de educación superior tenemos el deber de despertar y
fomentar la visión y vocación del emprendimiento en nuestros estudiantes
al brindarles espacios y oportunidades en los que apliquen de manera
práctica sus conocimientos, para la generación de soluciones a las
extensas problemáticas actuales”, expresó.
Agregó
que, el emprendedor se sitúa como un agente de cambio social que destaca
por su creatividad, capacidad de innovación, sentido de responsabilidad
y un adecuado manejo del riesgo; la innovación por su parte
es un matiz inherente al concepto del emprendimiento, las nuevas ideas y
el aprovechamiento de oportunidades que se adoptan en los proyectos
emprendedores para crear nuevos productos o servicios, que permiten
afrontar con éxito los diferentes desafíos del
mundo actual.
Comentó
que, ante la emergencia sanitaria, el aislamiento social y la crisis
generada por el COVID-19, el emprendimiento con impacto social ha
cobrado un mayor sentido entre los jóvenes universitarios, la gran
capacidad de resiliencia frente a la adversidad que se ha generado en
ellos les ha permitido proponer y brindar soluciones para numerosos
problemas.
Durante
los últimos 8 años de este Premio UNITEC, se han recibido más de 400
proyectos de jóvenes emprendedores universitarios, provenientes de
distintas entidades de la república mexicana, así como de diversas
instituciones educativas tanto públicas como privadas. Hasta ahora han
sido premiados 38 proyectos que impactan favorablemente en la vida de
cientos de personas.